domingo, 27 de septiembre de 2009

Houston, tenemos un problema..

Hola guaguas
Niños y niñas (uso lenguaje incluyente, vieron vieron). Internet en general, madres y padres de familia, solteros y solteras, gays/straight/nosabenocontesta, criaturas interdimensional, uni, bi y tridimensionales, conjuntos y agrupaciones, madres y padres solteros con y sin hijos. Vía láctea y plancton genérico...
De mis consideraciones.

No estoy muy orgullosa de mi intento posmoderno de poema posmoderno. No sé. Apareció de la nada o tal vez de una patata mal digerida, como alguna vez dijo nuestro gran amigo Ebenezer Scrooge. Su servidora carece de justificativo, excepto del simple hecho de que quería intentarlo. Vaya usted a saber.

Pero la cosa, cosita, es que tenemos un problema.

Estoy más extraña que de costumbre. Digo, nunca he sido una ciudadana demasiado apegada a ese bicho que se llama normalidad. No obstante, últimamente ando en un extraño limbo. Verán, debo regresar al UIO pronto, y hay una parte de mí que se hace pipí del susto solo con escucharlo. Además del hecho del bajo control de esfínteres (sniff... sniff...) que semejante hecho provoca, tengo una tesina que está fuera de control y que se escribe sin que yo entienda muy bien qué está pasando. Tengo 26 páginas de nonsense sobre Relaciones Internacionales y tengo que llegar a 50.

No contemos con el hecho de que necesito hacerme continuamente ctrl alt supr cada dos por tres porque me quedo fascinada con una manzana, el paisaje, una cosa que leo en Internet. El hecho de que esté leyendo Amélie Nothomb no ayuda demasiado. Esa es la situación. No estoy acá acá, sino que ando muy ACÁ: o sea, en mi cabezota.
Y mi cabeza parece una película en blanco y negro. De esas en las que la gente anda manejando el coche y atrás aparece una calle que se repite una y otra y otra vez. A nadie le importa, porque Humprey Bogart le está diciendo cosas bonitas a Audrey Hepburn. La vie en Rose.

Sí, así está mi cabeza.

No he olvidado el blog, tampoco lo he abandonado. Tengo que poner orden en mi cerebro y le puse Racumín al perro negro, pero está rondando. Supongo que tengo que dejar las cosas bien organizadas y ver al frente sin tantas ñáñaras. ¡Ayúdanos Papá Pitufo!

En fin, vuelvo a Darfur, Israel y la religión en las Relaciones Internacionales. Si alguien tien alguna sugerencia, comentario, tomatazo, apoyo moral o prozac en forma de palabras, por favor, dirigirse a la sucursal "comentarios" acá abajito.
Venga tíos, agur. Papas Fritas para todos. Glam Charm y Porn y todas esas cosas que vienen en paquetitos de a tres, con celofán y que se comen con pimientos dulces.